miércoles, diciembre 22, 2004

Más sobre el viaje

El día antes de ir a Bilbao (porque antes no sabía ni la hora en que íbamos ni nada) llamé a la que ha sido mi mejor amiga por internet desde que tuve conexión en casa allá en el 2001. Por desgracia tenía el móvil apagado y no pudimos concretar nada. Pero al día siguiente recibí un sms suyo sobre la llamada cuando ya estaba en Bilbao, y aunque en un primer momento mi respuesta de que estaba en Bilbao y que se enterara estando allí la cabreó (aunque ella lo niegue ahora cuando replique en los comentarios jeje), al final y un poco por los pelos, conseguimos vernos algunos minutos mientras el grupo con el que yo iba se trasladaba a pie del guggenheim al restaurante donde comimos. Fue bastante emotivo y muy alocado, primero los abrazos al encontrarnos después de tanto tiempo que nos conocíamos, luego hablando para actualizar lo sucedido desde la última vez que coincidimos en la red (últimamente no habíamos podido hablar tan a menudo como antes) mientras yo sacaba fotos como un bobo de las que en ninguna salimos completos y en las que yo salgo con cada cara que pa qué :-S (y ella que decía que no quería salir por estar poco arreglada sale bien en todas, la jodía :D). La verdad que fue poco tiempo y no pudimos hablar casi nada, pero sin duda valió la pena :).

Otra cosa menos grata del viaje fue el intento de retomar el trato con un amigo con el que había discutido algunos días antes y ello pase a que lo último que había sabido de él antes del viaje no me dejaba en buen lugar y me costaba mucho acercarme a él sin sentir que le molestaba. Ya tras el regreso me dijo que de mi discusión no había vuelto a decir más nada porque no tenía nada que rebatirme, lo cual hace pensar que por su parte no había motivo de enfado. Sin embargo, sigo sin tener contacto alguno con él, no sé, quizás la discusión fue tan importante como para que la relación se deteriore hasta desaparecer pese al diálogo posterior. Supongo que este nuevo 2005 lo dirá...

Y estando ya a 1 de enero se hace ya casi imprescindible terminar ya este post, lo cual haré con una última anécdota un poco más curiosa/divertida. De todos es sabido la fama que tienen los vascos de fuertes/brutos/chulos. Un ejemplo de ello son siempre los chistes, como aquél que dice: "Oye, patxi, ¿te das cuenta de que estamos discutiendo cuando podríamos arreglarlo a hostias?". Pues bien, justo en el momento de regresar a Granada (casi se diría que para no irme habiendo perdido la oportunidad de hacerlo), le di una patada a un vasco, que además era más grande que yo y seguro que más fuerte, y lo mejor es que ni siquiera se enfadó... xD, y bueno..., prefiero no explicarlo más y dejar que crezca la leyenda... >:-D.

martes, diciembre 21, 2004

Irún

Bueno, creo que va siendo hora de actualizar un poco esto, que entre unas cosas y otras lo he ido dejando mucho...

Finalmente sí que hice el viaje que mencionaba en el mensaje anterior, del 4 al 8 de diciembre, y que fue a Irún (en Guipúzcoa) junto a otras 200 personas y que se llamaba RAM 2004. Justo el día antes de irme me recuperé casi del todo de mi problema con la tos, con lo cual el viaje fue bastante más agradable, pese a que empezara con casi 14 horas de autobús para llegar desde Granada a Irún...

Nada más llegar a la puerta del hotel comencé a ver a un montón de gente conocida sólo a través de fotos y mensajes en listas de correo, de las que reconocía a la mayoría pero en cambio a mí, ni los que me habían visto en alguna foto me reconocían, así que en un primer momento pasamos totalmente desapercibidos entre ella hasta las habitaciones para dejar las maletas y tomar un poco de valor pa enfrentarme a conocer en persona a tanta gente :S.

Aunque nadie me reconociera al verme y ni tan siquiera por mi nombre, mi nick del irc, que también usaba en el Ricochet Robot, sí que causaba mucho más efecto. Me quedé bastante sorprendido de todos los que me conocían por él. Recuerdo, por ejemplo, una buena amiga, que fue de las primeras personas que conocí en el irc, que primero, cuando le pregunté si era quién yo creía y me dijo que sí, me miraba con cara de no tener ni idea de quién era, y al decirle mi nick ya me abrazó bastante emocionada y todo :).

Uff, creo que voy a aligerar un poco, que me estoy extendiendo mucho xD. Fueron cuatro días bastante intensos, en los que apenas dormí unas 2-3 horas por día porque pasábamos las madrugadas hasta las 4 o las 5 jugando a diversos juegos a cual más desconocido y adquirido más lejos: Hombre lobo, Set, Catán, Alhambra (éste era francés, por mucho que el nombre haga pensar otra cosa... xD), quoridor, etc.

Luego tuvimos un montón de actividades en el hotel, además de muchos desayunos, comidas y cenas: un concierto, una noche de chistes, otro día con ponencias, rol en vivo (a éste no me apunté porque estaba aprendiendo a jugar al catán xD).

Fuera del hotel también estuve visitando san sebastián, en bilbao en el guggenheim y comiendo en la casa vasca y en una sidrería típica guipuzcoana, en la que había unos toneles enormes de 15000 litros con un grifo muy pequeño, que un encargado habría para que cayera desde lo alto y los demás pasábamos por allí llenando las copas. La idea era coger poquita sidra y que hiciera bastante espuma, bebiéndola en el momento, que es cuando mejor sabe. En la misma sidrería tuvimos también la actuación de un ochote, que es un grupo de ocho voces masculinas típico del país vasco, y que en nuestro caso era especialmente bueno y triunfó. Lo cual me recuerda el día que en el hotel tuve la suerte de asistir a una sesión improvisada de ópera en los servicios (que por lo visto tenían las condiciones acústicas necesarias jeje).

Pero aparte de todas las actividades, lo mejor fue conocer a un montón tanto de amigos como de simples conocidos por internet. Curiosamente, pese a lo que suele decirse, no noté casi diferencia entre la idea que me había formado de su yo cibernético y la realidad, aunque sí que me sorprendí al descubrir, por ejemplo, que tenía ideas equivocadas (por exceso o defecto) de la altura de much@s o que, aunque mis ideas no fueran desencaminadas, el conocerl@s en persona siempre aporta cosas que no era fácil de imaginar, sobretodo en algunas de las personalidades más únicas, que las había muy únicas... jeje.

Total, que me lo he pasado de muerte, y a ver si puedo volver a ir a la reunión del año que viene, que en ésta aún me quedó alguna gente por conocer y algunas cosas por hacer, que habrá que intentar no dejar pasar otra vez :D.