lunes, junio 25, 2007

Réquiem por un pueblo, canto de resurrección

En un hilo al borde del vacío caminé por emociones que ahora no puedo contar, en un hilo al borde del vacío en el que era decidido el presente o el futuro, pero en el que al final fue el pasado quien la decisión tomó.

Chocó un sentimiento puro con un sentimiento en duda, de una inercia infranqueable, que al hallar nuevo camino, le dio la espalda tan rauda, huyó tan despavorida, que la entrada abandonada quedó tan resquebrajada que en el barrio al que llevaba ya nunca pudo entrar nada, ya nunca nada salió, y en las casas blanquecinas pensadores solitarios sus últimas frases pensaron, sus últimos cantos cantaron, e hicieron una llamada a la que nadie acudió.

Cuando al fin llegó el ocaso y siguió sin haber luz, el pueblo entero calló, el pueblo entero murió, y sólo quedaron ruinas, sólo el silencio quedó, y para romperlo no había más que un triste ruiseñor, que escuchó toda la historia, las palabras que murieron, las que en susurros surgieron, las que no se produjeron pero que su corazón sintió.

Un ruiseñor contrariado, un cronista improvisado, que no tenía palabras, que a hablar nunca aprendió, y que sólo se expresaba con un canto estrangulado, un quejido asolador, que hacía llorar al aire impregnándolo de amor. Cuando escuchaba su canto, la gente se preguntaba cómo sería la historia con que ese trinar se fraguó, cómo serían las gentes con que vivió el ruiseñor. Pero visto de otro modo, visto sin el ruiseñor, nadie echó a faltar el pueblo, nadie mandó expedición, ni fue a recobrar los restos, ni a llorar su destrucción. Y las casas, poco a poco, con el viento y las tormentas, vieron temblar sus cimientos, vieron quebrarse sus puertas, vieron los muros caer, sólo algunos al principio, luego ya de dos en dos. Y siguiendo esta carrera, todo al fin se aceleró, y en un tiempo muy pequeño todo se desmoronó.

Pero si una vez fue bueno lo que aquel pueblo ofreció, si tuvo una vez valor la palabra de las gentes que aquel pueblillo albergó, lanzo desde aquí llamada para todo explorador: Busquen un camino roto, busquen la senda dañada que una vez allí llevó. Si reparan con cariño los senderos olvidados, o si hallan nuevas vías mejores que la anterior, hagan del pueblo su casa, promuevan reconstrucción, ya tienen allí las piedras, la larga calle mayor, y el ánimo en las palabras que el tiempo allí cautivó. Lleven consigo un martillo, un pico, y hasta una hoz, reconstruyan los pilares con el hierro de las vigas que ahora yacen en el suelo, y en la fragua del herrero que trabaje el material, que sea fuerte el sonido del martillo en su labor, y que el golpe inaugural, de materia vieja en nueva, sea un bramido inspirado, de un poder abrumador, que se extienda por el aire cual cantaba el ruiseñor.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Oh, has vuelto... Sorprendente tu forma de regresar: el relato fluye con toda naturalidad, a saber qué te lo habrá inspirado... y el final le da un valor añadido que se hace releer. Rebienvenido al club :)

infopoeta dijo...

Gracias Maribel :), no sé si es una vuelta vuelta o un post puntual... ya veremos. De todas formas, creo que nadie se ha percatado de él salvo tú y javi... En cuanto a la inspiración, no tiene tanto que ver con el tema del post, que un poco es un batiburrillo inconexo sobre una aparente historia.

¡Qué críptico estoy!, me criticaría por ello según mis "principios" de escritura, de hecho me criticaba pero aún así lo escribía, pero quizás como Grouch Marx decía (casi): "Estos son mis principios, pero si no me gustan, tengo otros."

Lo que sí que estoy pensándome hacer es una versión en mp3 del post, pero tampoco lo aseguro, digamos que hay un 30% de probabilidad. Tampoco la va a escuchar nadie... O:-)

Javi dijo...

Bueno, yo ya te dije que el texto me recuerda una postal gris, color ceniza, de un lugar arrasado por el horror, como por ejemplo Bosnia. Un viento intenta remover las cenizas, aunque hay grandes amasijos de hierro difícilmente puedan ya ser movidos de allí.

Aún así, entiendo que el autor no pretende nada concreto, y que es más bien como dices: un batiburrillo inconexo. Incluso de esta forma evoca cosas, y eso es importante.

infopoeta dijo...

Gracias Javi, sí, debe evocar cosas parecidas a eso, aunque imprecisas, habla de desolación y olvido, y al final de un poco de esperanza que siempre debe quedar, aunque hay cosas difíciles de mover una vez rotas, como tú dices... Un abrazo

elwen dijo...

Me alegra volver a verte y con una reentrada triunfal. Un post hermoso y perfecto, gracias por deleitarnos :)

infopoeta dijo...

Muchas gracias elwen por tus piropos... no sé si los merezco :$, pero se agradecen, mucho, y más ahora que no comenta casi nadie :S.

Anónimo dijo...

algunas no comentamos, pero si te leemos ;) es solo q hay cosas que se escapan de mi entendimiento y no puedo aportar mucho.... hasta fui una de las primeras en leerlo...

infopoeta dijo...

Gracias una loca :). Tampoco hace falta comentar, no, no hay obligaciones, pero a veces para comentar no hace falta aportar mucho, y un comentario breve o un simple "coj, coj" de vez en cuando ya es suficiente para que quien escribe sienta que sus palabras no se pierden en el vacío del desinterés ;).

Un beso